La abogada expuso sus argumentos: “Todos fueron procesados por los mismos hechos, todos quemaron el Congreso, todos incendiaron el mismo auto, todos entraron a Tribulación, todos hicieron destrozos en el mismo lugar, todos estaban haciendo lo mismo en el mismo lugar a pesar de haber sido detenidos en distintas horas y distintos lugares”.
Boccia resaltó que el noventa por ciento fueron detenidos en forma brutal por la policía. “Los golpearon, les patearon, les insultaron, para luego llevarlos a la Comandancia de la Policía, donde les pedían las billeteras, les sacaban todo el dinero que tenían, guardaban el dinero en un cajón de un escritorio y luego les devolvían la billetera, apoderándose en todos los casos de sus celulares”, comentó.
También expresó que en otros casos los obligaron a ir a un cajero a sacar plata para no irse presos. Tal es el caso de Manuel Antonio Gamarra, quien de manera arbitratria y violenta fue detenido mientras compraba para su cena, según explicó su hermana Maribel Gamarra.
contradicción. Boccia afirmó que los hábeas corpus no fueron admitidos en la mesa de entrada de la Corte, lo que les obligó a asistir a las 211 audiencias indagatorias. Sin embargo, desde la máxima instancia judicial emitieron un comunicado argumentando que todas las presentaciones de hábeas corpus recibieron el trámite de rigor.