La orden de allanamiento fue dictada por la jueza Mafalda Cameron y fue ejecutada por el oficial de Justicia Andrés Gómez Heyn, con acompañamiento de la policía y obreros comunales. Una amenaza de bomba obligó a la presencia de efectivos de la Fope.
Durante el operativo fue detenido Carlos López, quien explotaba el referido local, y que, tras resistirse a la medida, fue detenido por los efectivos policiales y enviado a dependencias de la Comisaría 3ª.
El director de Vigilancia de la institución municipal, Víctor López, explicó que “esta era una cámara frigorifica municipal, como la que tenemos en el Abasto, que estaba al servicio de quienes comerciaban con carne. Luego se robó el motor y se fue deteriorando, quedando en desuso. Carlos López la convirtió en depósito y aquí venían dueños de locales grandes a guardar sus mercaderías, pagando en promedio cada uno entre G. 5 y 6 millones mensuales”. “Esto es irregular porque esa persona no es permisionaria de Asunción e ilegal porque incurrió en un cobro indebido”, agregó.
Explicó que no se incautó ninguna mercadería y que se notificó a sus propietarios para el retiro tras firma de un acta.