La mencionada cifra aumentó debido a la reciente emisión de bonos soberanos que realizó el Poder Ejecutivo el mes de marzo pasado, en el mercado internacional, por USD 500 millones, lo que representó un 7% más luego de la última emisión el año anterior.
Con la última salida al mercado internacional, el gobierno de Horacio Cartes ya sumó USD 2.620 millones a la deuda pública desde el 2013, cuando asumió la presidencia.
De acuerdo con los documentos de Hacienda, al cierre del 2013 la deuda alcanzaba los USD 4.174 millones, lo que equivalía al 14,4% del PIB. Para el 2014 incrementó a USD 5.400 millones, llegando al 17,6% del PIB.
El 2015 cerró con un saldo de USD 5.464 millones, llegando al 20% del PIB; mientras que el año pasado la deuda llegó a USD 6.294 millones, equivalente al 23,1% del PIB. Eso hace que con la nueva emisión de USD 500 millones, como ya se mencionó, los compromisos del Estado lleguen al 24,3% del PIB.
Asimismo, es importante mencionar que de los últimos USD 500 millones captados, un 57% será destinado al repago de deuda anterior (USD 313 millones); mientras que el restante 43% (USD 187 millones) se deben destinar a 31 proyectos de infraestructura del MOPC.
CLASIFICACIÓN. Por otro lado la deuda pública está compuesta en un 78,8% (USD 5.357 millones) en compromisos externos y un 21,2% (USD 1.437 millones) en compromisos internos.
Entre los mayores acreedores del Estado en el mercado internacional se encuentran entidades como el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y el Banco Mundial (BM).
Mientras que entre otros acreedores también figuran bancos que operan en el país, como Itaú, Regional y Continental, quienes adquirieron bonos lanzados al mercado interno.
Cabe destacar que el Gobierno aún mantiene pendiente la emisión de USD 58 millones en el mercado interno, cuya fecha de emisión aún no ha sido confirmada por las autoridades.
Finalmente, vale recordar que en reiteradas ocasiones analistas económicos y financieros independientes han expresado su preocupación por el acelerado ritmo de endeudamiento durante los últimos años. Sin embargo, el Gobierno se ha defendido indicando que el nivel es de los más bajos de la región y que con el respeto al tope del 1,5% de déficit fiscal que establece la Ley de Responsabilidad, la deuda aún es sostenible.