Las empresas habían reclamado varios puntos durante el periodo de la consulta pública, aunque la queja común fue que el monto exigido por la Conatel era excesivo, en comparación con las últimas subastas de la banda 4G que se hicieron en la región. Solicitaron modificaciones para el pliego definitivo. Teresita Palacios, presidenta del ente, dijo que algunos pedidos que hicieron las telefónicas son atendibles, pero otros no.
“El precio es lo que más se objeta. Se están ajustando algunos puntos, no son modificaciones muy sustanciales. Pero mañana (hoy) vamos a estar revisando en el directorio, verificamos qué es lo que se pidió, qué es lo atendible y seguramente que en la otra semana ya vamos a tener el pliego final”, indicó.
La vigencia de cinco años de las licencias, así como la exigencia de proveer coberturas 4G en determinadas rutas del país y el cumplimiento de ciertas cargas sociales también fueron cuestionados por las operadoras. Por otro lado, Palacios reiteró que no despojó de ninguna frecuencia a Copaco, como protestan sus sindicalistas. Explicó que se reordenó la frecuencia con un tope de espectro de cara a la subasta y en consecuencia su banda de 5 + 5 MHz que tenían 1.700-2.100 MHz fue a la de 700 MHz, que también sirve para 4G.